lunes, 21 de septiembre de 2009

m,,*

____________________________________________

Qé tanto alcanzan a ver los ojos, qe se vuelven ciegos a sí mismos ante el espejo.
Y el rostro se ve, pero los ojos pasan, a menudo, inadvertidos.
Raramente advierte uno mismo el color de sus propios ojos y, raramente, puede alguien cambiar tu mirada...

________________________________________

No hay comentarios: