Cuando era chiquita, había una cosa qe me inquietaba desmesuradamente: cuando un adulto se me acercaba, y ponía esa sonrisa a conjunto con ese tono qe se suele utilizar con los chicos, entonces me preguntaba:

- ¿Qué querés ser cuando seás grande?
- ¿Ah, Pero no voy a ser yo?- pensé la primera vez...

Desde entonces empecé a darle vueltas al asunto, horas, días... sin lograr saber cómo responder a dicha pregunta. Pensaba "¿Tengo que elegir una persona o también puedo elegir una cosa? ¿Puedo ser un gato, por ejemplo? ¿Puedo ser un cuento...?"

La verdad es que todavía no llegé a ser nada en la vida, porque aún estoy decidiendome. Claro que si ahora alguien me hiciera la pregunta, creo que tendría una respuesta bastante clara:

Yo lo que quiero es ser yo mísma; encontrar el arte en cada pequeña bocanada de aire, disfrutar sola, y acompañada también, rodearme de gente que me rompa el corazón, y de otros pocos que nunca lo harán, aprender... y elegir ser libre.

Y como alguien dijo una vez:
"No elijo lo fácil, es para fracasados"